La Hipnosis: una poderosa herramienta para acceder a tu mente y reprogramarla

Probablemente cuando escuchas el término hipnosis o hipnotismo, por la mente te pasan varias cosas.

Quizás pienses en aquel mago que controla la mente de las personas y les hace decir cosas graciosas de las cuales ellas mismas no son conscientes. Y sí, este de hipnosis existe. Sin embargo, únicamente se utiliza para entretener, hacer reír, pasar un rato agradable, etc. Por lo tanto, aquí, no vamos a hablar de ella.

El tipo de hipnotismo que realmente vamos a tratar aquí, es el hipnotismo clínico o hipnosis clínica. Una técnica que se utiliza mucho dentro de la psicoterapia y que muchos psicólogos y psiquiatras llevan a cabo en sus consultas con el fin de sanar y restaurar a las personas.

¿Y para qué sirve? ¿Qué logramos con ella? ¿Cómo se debe llevar a cabo un tratamiento hipnótico? ¿Quiénes deben someterse a este tipo de tratamiento?… Vamos a responder cada una de estas preguntas a continuación.

La hipnosis clínica

Este tipo de hipnosis es una herramienta que permite acceder rápidamente a las memorias o recuerdos de una persona. Recuerdos que, probablemente, están escondidos en su subconsciente o inconsciente.

Una vez que se accede a estos recuerdos que tienen que ver con traumas o eventos difíciles, se puede aprovechar y desarrollar cualquier tipo de psicoterapia.

De esta forma el psicólogo, en vez de desarrollar una terapia de meses, puede ayudar a superar el trauma de un paciente en dos o tres consultas, incluso en una sola.

Cabe destacar también que el hipnotismo clínico es una técnica aprobada por la Asociación Americana de Psicología (APA).

Ahora bien,

¿Podríamos quitar un dolor físico a través de terapia hipnótica?

Sí, efectivamente. Aunque, desafortunadamente no ocurre en todos los casos, debido a que no todos los pacientes acceden a estados hipnóticos profundos.

Si se está en presencia de un paciente que es altamente hipnotizable (o altamente sugestionable), se podría dar la orden de que cierto dolor se vaya, y efectivamente, el dolor desaparecerá.

Hay miles de estudios clínicos indexados en revistas médicas donde aparece la efectividad que tiene la terapia hipnótica en el control del dolor.

En países como España, por ejemplo, se utiliza mucho la analgesia o la anestesia bajo hipnosis. Hay casos en donde se han podido desarrollar pequeñas cirugías de varices, programar mujeres para un parto, hacer procedimientos odontológicos, y como anestesia haber usado únicamente hipnotismo.

¿Cuándo un paciente empieza a ver mejoría?

Depende principalmente de su susceptibilidad hipnótica. Como bien se indicó, algunas personas entran más fácilmente en estados hipnóticos o inconscientes donde es posible procesar el trauma, el evento, la situación o el hábito que se desea modificar. Sin embargo, hay personas que son mucho más difíciles de relajar y eso depende de su fisiología.

¿Cómo se explica esto último? Bien, a través de nuestras ondas cerebrales. Así, por ejemplo, Beta es la onda cerebral en donde estamos conscientes. No obstante, hay otras tres ondas cerebrales que son las ondas que se relacionan con el subconsciente o el inconsciente y son: Alfa, Theta y Delta; siendo Delta, la onda en donde estamos dormidos.

Entre las ondas Beta (la mente consciente) y Alfa (la mente inconsciente), existe una pequeña línea o barrera. A esa línea se le denomina: barrera crítica-analítica. Algunas personas poseen una barrera crítica-analítica muy delgada, permitiendo penetrar con mayor facilidad a ese estado de inconsciencia. Pero, por otro lado, hay otras personas que tienen esa barrera crítica-analítica muy gruesa, por lo que es más difícil entrar al inconsciente.

El hipnotismo como terapia contra el miedo

La terapia hipnótica no solamente se puede utilizar para sanar eventos traumáticos, suprimir el dolor o sanar cosas del pasado, también puede utilizarse para programar lo que queremos o para mejorar el desarrollo en alguna área, por ejemplo: el temor a hablar en público.

Muchas veces se puede tener este temor y no existir ningún trauma al respecto. Simplemente es uno de los miedos más comunes que existe. No obstante, este temor se puede trabajar también con tratamientos hipnóticos a través de la programación del subconsciente. De la misma forma se pueden tratar muchos otros miedos, ataques de pánico y fobias.

Tabúes acerca de la terapia hipnótica

Cabe aclarar que, este tipo de hipnosis no tiene nada que ver con la magia, como a veces lo suelen pintar en las películas. Simplemente nos referimos a un estado natural de la mente o un estado superior de la consciencia. Incluso, hay ocasiones del día en donde podemos estar hipnotizados y no darnos cuenta de ello.

¡El hipnotismo NO es peligroso!

Todo tratamiento hipnótico desarrollado por un terapeuta certificado y calificado, no tiene ningún tipo de riesgo. Y se puede desempeñar en cualquier tipo de persona que cumpla las condiciones para la terapia. Lo importante aquí, es buscar siempre a la persona idónea que esté certificada para llevar a cabo el tratamiento.

¿Te gustaría llevar a cabo esta terapia?

Antes debes tener en cuenta lo siguiente:

• Es aconsejable que busques un terapeuta, psicólogo o psiquiatra, que esté calificado para llevar a cabo este proceso. No cualquiera puede realizar un tratamiento hipnótico. Y si una persona no está calificada o no lleva a cabo el tratamiento de forma adecuada, podría generar más daño.
• Es sumamente importante que exista empatía y confianza con el terapeuta.
• El paciente debe cumplir ciertas condiciones, entre ellas están: que sea capaz de relajarse, de prestar atención y que no tenga ningún tipo de discapacidad cognitivo-cerebral.

Realmente está comprobado que el hipnotismo clínico sí funciona. De hecho, hay algunos trastornos psicológicos en los que se suele dar al paciente como primera elección la terapia hipnótica, antes que la terapia farmacológica. Eso sí, hay que tener en cuenta que, solamente el 10% de las personas alcanzan estados hipnóticos profundos.

No obstante, si una persona no llega a ese estado profundo, pero llega a un estado adecuado donde el terapeuta puede acceder a sus recuerdos y buscar el origen del trauma, es posible poco a poco realizar la sanación del mismo.

En algunos pacientes, donde los estados hipnóticos no son muy profundos, es también útil utilizar la hipnopedia: un audio de programación que se recomienda escuchar por las noches mientras se duerme. Este audio se repite en la noche constantemente con una información que permite reforzar la terapia hipnótica, garantizando que el tratamiento rinda resultados con el tiempo.

Hasta aquí, todo lo que debes conocer acerca de esta técnica y no olvides seguir las recomendaciones que aquí damos en caso de que desees someterte a un tratamiento de hipnosis clínica. Esta también es una vía útil para superar cualquier tipo de trauma, miedo, ansiedad o trastorno psicológico.

Sin más que agregar, te invito también a leer sobre la moda del positivismo: sé optimista, pero no exageres.

Un saludo cordial

Por: Adrian Alberto ∼ lavidaysumagia.com