“La envidia es el dolor que causa la prosperidad de los otros”, eso dijo Aristóteles, refiriéndose a ese sentimiento humano que se caracteriza por descontento y resentimiento por no poseer lo que el otro tiene.
Se puede decir que un envidioso vendría siendo la versión negativa de un admirador secreto, que en lugar de desearte lo mejor y alegrarse por lo que tienes, solo desea lo que tú tienes y te hace feliz. Ese sentimiento de deseo al envidioso le genera desdicha, dolor y muchísimo resentimiento.
5 señales para identificar a una persona envidiosa
La envidia es un sentimiento muy humano, en algún momento cualquier persona puede experimentarla, sin embargo, no todos logran gestionar ese sentimiento.
La envidia no es un defecto en las personas, simplemente es una emoción de carácter universal que ha sido catalogada como una palabra ofensiva muchas veces, ya que este ha sido un sentimiento difícil de reconocer por muchos.
Las señales de envidia no siempre son fáciles de reconocer, ya que la persona envidiosa es muy sutil para expresar sus emociones negativas. Generalmente, los envidiosos suelen camuflarse muy bien, por lo que resulta complicado que logres identificar esas señales y protegerte de las malas intenciones.
A continuación, compartiré esas señales que te ayudarán a identificar a un envidioso:
1. Critica y señala tus errores constantemente
La persona envidiosa siempre buscará la manera de hacerte sentir mal, verte triste, desmotivado y con desgano. Encuentra placer al verte en una situación de desventaja, ya que te ve como un competidor, como un rival a vencer con juego sucio.
El envidioso señalará tus defectos, faltas y errores, no con la intención de motivarte, ni mucho menos de que veas en tus faltas un aprendizaje útil para tu crecimiento personal. El propósito es señalar tus errores con la única finalidad de hacerte sentir culpable.
2. Falsos sentimientos
Una señal indiscutible y propia de todo envidioso es su exagerada forma de resaltar sus emociones al ver tus logros. Siempre que pueda buscará usar el ego de sus víctimas, sea para acercarse, buscar información que le sirva para crear chismes o simplemente sacar provecho del estatus que tenga la persona a quien envidia.
Por lo general, nunca suelen ser sinceros, honestos, sino más bien exagerados. Los envidiosos son muy buenos maquillando y escondiendo sus verdaderos sentimientos.
3. Inventan rumores sobre ti
Los envidiosos saben muy bien cómo crear chismes y rumores sobre ti, esos rumores solo buscan tu desprestigio y desacreditar tu carácter frente a los demás.
Estas personas saben perfectamente manipular y distorsionar las cosas. De hecho, son muy buenas para fingir y crear una falsa imagen de sí mismos.
Las personas envidiosas son personas tóxicas y por lo tanto un peligro para tu bienestar emocional.
4. Siempre tratan de desmotivarte
Ten mucho cuidado de contar tus proyectos, aspiraciones y sueños a alguien de quién sospechas es envidioso/a.
Ya que el envidioso intentará desmotivarte de tus objetivos y que no seas capaz de lograr lo que te propongas. Si le hablas de un nuevo trabajo buscará la manera de que le veas el lado negativo a ese trabajo.
5. No son amigos en momentos difíciles
El envidioso es incapaz de tolerar el éxito de los demás. Sin embargo, siempre estará allí como un falso amigo para sacar provecho de tus éxitos y de tu estatus.
El envidioso es además un buen manipulador, estará contigo en las buenas como un amigo incondicional, pero en tus dificultades no será ese amigo incondicional que parecía ser. Si llegas a coincidir con este tipo de persona, ten mucho cuidado.
La mirada del envidioso está puesta afuera, en los talentos, en la felicidad, en la dicha y en la alegría ajena. En lugar de mirar para sus propios talentos y dichas, se compara con otros. Esto solamente denota su baja autoestima.
Detrás de un envidioso hay un dolor intenso fomentado por sentimientos negativos al compararse con la realidad de la persona que envidia.
El famoso escritor y político romano, Cicerón, se refirió una vez a la envidia, y dijo: “nadie que confía en sí mismo, envidia la virtud del otro”.
Y cuando hablamos de envidiosos, generalmente suelen ser personas cercanas, personas que conocemos como familiares, amigos, parejas y hasta compañeros de trabajo.
Identificar las señales de envidia hacia nosotros, es fundamental para protegernos del daño que nos pueden causar este tipo de personas, y ahorrarnos de esta manera varios dolores de cabeza.
Aunque no puedes liberarte de la envidia externa, puedes proteger tu campo energético para que no se te acerquen las personas con malas intensiones.
Por: Edduard Alexander – lavidaysumagia.com
