Meditar a diario genera increíbles cambios positivos en tu vida
Para ti, ¿qué significa meditar? ¿Qué es lo primero que se te pasa por la mente cuando escuchas la palabra «meditación»?
Muchas personas hoy en día tienen una idea equivocada de lo que representa esta práctica. Algunos la asocian con la religión o la espiritualidad, con la relajación o el descanso. Otros simplemente creen que es una “forma de perder tiempo”.
Más allá de los innumerables mitos que hay sobre ella, esta práctica realmente ofrece muchos beneficios en la salud de todo ser humano.
Aquí, te vamos a hablar de algunos de ellos y de cómo puedes empezar a realizar tus primeros minutos de meditación. Estoy seguro que después de leer esto, te darás cuenta que meditar es algo fundamental para nuestras vidas.
¿Por qué es aconsejable meditar?
Para empezar, te explicamos las ventajas que nos ofrece la meditación como hábito:
1. Ofrece salud y bienestar
Sí, meditar es completamente sano. Un estudio realizado por Elizabeth Blackburn, ganadora del premio nobel de medicina, sostiene que la meditación tiene un efecto positivo en el cuerpo a nivel genético, ya que ayuda a proteger la longitud de los telómeros (una secuencia especial de ADN usada como indicador del envejecimiento).
Mientras más avanzada sea la edad de una persona más cortos serán sus telómeros y, por supuesto, este es un proceso inevitable. Ahora bien, este acortamiento continuo se puede ralentizar. El ejercicio y una buena alimentación son dos formas efectivas de hacerlo. Sin embargo, una tercera forma muy efectiva que también hay, es meditando.
2. Mejora la estructura biológica del cerebro
La meditación produce cambios de tamaño en el cerebro. Varios estudios llevados a cabo por investigadores de la Universidad de Harvard lo han demostrado.
Se dice que si meditas por 8 semanas, cambios físicos ocurrirán en distintas áreas de tu cerebro. Una de ellas es el cingulado posterior, un área que está vinculada con el sistema límbico y que se encarga de controlar la divagación mental. Esto significa que tu concentración mejorará considerablemente.
Asimismo, estos estudios reflejaron dos beneficios más:
- Un aumento en el grosor del hipocampo izquierdo: el área responsable del aprendizaje y la memoria.
- Un incremento de materia gris en la unión temporoparietal (TPJ): la zona que se encarga de la compasión y la empatía.
- Y una reducción en el volumen de la amígdala cerebral: la cual está vinculada con el miedo, la ansiedad y el estrés.
En suma, si meditas a diario obtendrás una mayor facilidad para aprender y para retener información. Por otro lado, estarás menos propenso a experimentar emociones negativas.
3. Ayuda a superar malos hábitos o adicciones
Las ciencias médicas también han demostrado a través de diversos estudios que la meditación puede favorecer los procesos de toma de decisiones y la fuerza de voluntad de quienes la practican.
Es por eso que, muchos profesionales de la psicología y de la medicina general o alternativa, la recomiendan como técnica complementaria dentro de un proceso de superación de adicciones, para tratar problemas de depresión, nerviosismo, trastornos del sueño, etc.
4. Produce felicidad
La meditación estimula la producción de ondas gamma, un patrón de oscilación neuronal que tiene lugar en todos los seres humanos y que está asociado con la inteligencia, la compasión, el autocontrol, la empatía y, por supuesto, con los sentimientos de felicidad.
Mientras más tiempo medites, mayor será tu producción de ondas gamma.
Ahora bien… si deseas meditar, pero no sabes cómo hacerlo, a continuación, vamos a responder las dudas más comunes que pueden surgir sobre la práctica:
¿Dónde puedes meditar?
Esta técnica la puedes llevar a cabo donde tú quieras. Recuerda que este es un ejercicio para la mente, así que, puede llevarse a cabo en cualquier lugar: en el piso, en el césped de tu jardín, en una silla, o incluso acostado en la cama.
Por lo general, algunos expertos en meditación recomiendan que sea sentado en el piso y con la espalda recta, pues así te mantienes despierto y es más cómodo permanecer en esa posición por largos periodos de tiempo.
¿Por cuánto tiempo debes meditar?
Antes de comenzar la sesión de meditación, si eres principiante, te sugerimos que pongas una alarma, de manera que no te concentres en el tiempo que esta debe durar. Si pones la alarma no sentirás la necesidad de verificar cuánto te falta para terminar.
Ahora bien, expertos recomiendan que se medite entre 10 y 20 minutos. No obstante, puedes comenzar practicando solo 5 minutos y a medida que te vayas acostumbrando, podrás ir aumentando el tiempo de forma gradual.
¿Qué tan seguido debes practicar la meditación?
Debes practicarla todos los días, de lunes a domingo, sobre todo si quieres obtener todos los beneficios que esta ofrece.
Generalmente algunas personas prefieren realizar su jornada de meditación después de haberse levantado y bañado. Otras, en cambio, prefieren hacerlo antes de ir dormir. Todo dependerá de cómo desees llevar a cabo tu práctica y del tiempo que dispongas.
¿Cuál debe ser la posición de tu cuerpo mientras meditas?
Expertos en esta práctica aconsejan que, si estas sentado en el piso, lo ideal es que mantengas un pie arriba del otro. Aunque, si eres principiante, está bien si únicamente cruzas las piernas. Eso sí, los brazos deben estar descansando sobre tus muslos y una de tus manos debe estar sobre la otra en forma de copa.
Lo primordial aquí, es que tus brazos se sientan relajados, tu espalda esté recta y tu cabeza esté nivelada. Tu cabeza no debe estar inclinada hacia arriba o hacia abajo, simplemente hacia enfrente.
En cuanto a tus ojos, estos pueden mantenerse abiertos o cerrados, pero para alguien que está iniciando es más fácil concentrarse con los ojos cerrados.
¿Qué debes hacer durante la meditación?
Todo depende, pues existen muchas variaciones de la meditación.
En algunos casos debes enfocarte en cosas a tu alrededor, mientras que en otras tienes que recitar palabras o mantras en tu mente.
Sin embargo, la forma más común de meditación que hay, es aquella que se enfoca en la respiración, también conocida como meditación de plena conciencia. Una técnica basada en este tipo de meditación, es la técnica del Mindfulness, de la cual ya hemos hablado aquí con anterioridad.
Bien, lo único que debes hacer para llevarla a cabo es respirar por la nariz y enfocar todos tus pensamientos en ese sencillo acto: la respiración.
Presta atención en cómo el aire fluye por tus fosas nasales y observa cómo se lleva a cabo la transición de inhalar a exhalar. Presta atención a esa breve pausa entre esas dos acciones y observa cada aspecto del proceso. Solo presta atención, observa y siente.
A lo mejor notarás que tu mente se distrae con mucha facilidad, por lo que en ocasiones te será casi imposible evitar pensamientos distractores. Sin embargo, cuando esto te suceda, simplemente regresa tu atención a la respiración. De esta manera estarás entrenando a tu consciencia.
Y no te frustres si al principio te parece un poco complicado, debes simplemente seguir intentando. Lo importante es que seas constante.
¿Cuándo empezarás a ver los beneficios?
Todo dependerá de la frecuencia con que medites y por cuánto tiempo lo hagas. Si lo llevas a cabo diariamente y le inviertes buen tiempo, te irás percatando de algunos cambios en pocas semanas.
Hasta aquí, todo lo básico que necesitas conocer acerca de la meditación. Queda demostrado que meditar es algo esencial para nuestra salud, así que, empieza desde ya a adoptar este hábito.
Sin más que agregar, te invito también a leer sobre el Ho’oponopono, una técnica poderosa de sanación que está dando mucho de qué hablar.
Un saludo cordial.
Por: Adrian Alberto ∼ lavidaysumagia.com